Hace 28 años toda España contuvo la respiración por uno de los crímenes más salvajes de ETA. El secuestro y asesinato del joven concejal de Ermua Miguel Ángel Blanco. El crimen dio origen a un cambio social que acabó por precipitar la derrota de los terroristas. Cada año, se produce una concentración en memoria de Miguel Ángel que sirve también como homenaje a todas las víctimas del terrorismo.